ARTÍCULO DE USUARIO: Pezones 101

ARTÍCULO DE USUARIO: Pezones 101

de Noticias Recon

12 octubre 2020

Por VERSPIGLDN

A lo largo de los últimos años, varios cerdakos me han venido preguntando cómo he conseguido tener unos pezones tan grandes, sobre todo cuando veían mi reacción cuando me los trabajan – la polla se me pone super dura – y me preguntan qué pueden hacer ellos para conseguir que los suyos sean así de sensibles.

Mis pezones no han sido siempre así de sensibles, eso sí, empecé a trabajármelos al final de la adolescencia, cuando me lo montaba con un Master que me ponía pinzas mientras llevaba la capucha puesta. Al principio no tenía ni idea de qué era esa sensación. ¿Calor? ¿Dolor? ¿Las dos cosas juntas? Pero lo que me ponía es que era algo desconocido. Era una sensación que no había tenido antes, y gracias a la privación sensorial, y al tener la capucha puesta y estar atado a la cama con las pernas abiertas, todo este rollo era algo tan confuso como excitante. Es un sentimiento que siempre asociaré con los momentos en los que me trabajaban los pezones.

Muchos tíos dicen que les da igual que les toquen los pezones, y normalmente puedes darte cuenta de esto si juegan con los tuyos o no. Está claro que, si no te gusta algo, de forma instintiva no te vas a poner a hacérselo a otro, a menos que te lo pidan explícitamente. También están los tíos que insisten en que les trabajes los pezones, te cogen las manos – aunque te estés apoyando en ellas – para que les agarres de las tetas; hasta en plan pesado. La comunicación es clave al comentar los fetichismos y los morbos que os gustan a los dos y a otros tíos. Si a ti no te ponen los pezones, es una buena idea preguntarle al otro tío CÓMO le gusta que se los trabajen. A algunos les gusta que se los acaricien con suavidad, a otros, yo incluido, les gusta si usas las uñas – aunque normalmente hace falta un calentamiento previo. A menudo, cuando tengo que decir más fuerte por tercera vez, lo que acabo diciendo es "hazlo como si me odiases", y de esa forma me acaban dando el nivel adecuado de dolor. Como digo, la comunicación es fundamental.

¿Bueno y cómo consigo ponerlos a tono? En mi opinión, trabajarlos poco a poco es el primer paso, ya que así se llenan de sangre las células de los pezones, aumentando el tamaño a la vez que activas la sensibilidad.
Hace dos años, estaba bailando en un club de sexo y dos tíos estaban decidiendo si venir a hablar conmigo o no, finalmente uno de ellos viene y me dice, ''me mola lo grandes que son tus pezones, ¡¿cómo puedo conseguir que los míos se hagan tan grandes como los tuyos?!". Me encantó su entusiasmo y le dije que sabía entrenar los pezones de los tíos para que se les hiciesen más grandes. La clave es la cantidad de tiempo y la regularidad con la que lo hagas, más que solo la intensidad. Como todas las buenas cosas de la vida, se necesita paciencia y dedicación.

Ventosas:

Usad las ventosas a menudo, yo os recomendaría ventosas de silicona o ventosas retorcidas. Hay una gran variedad de ventosas, para sacarlos hacia fuera. Hay una marca en particular que se llama Supple Nipples (Pezones Flexibles) – está claro que no es el nombre más excitante del mundo, pero funcionan bien. Si estás empezando en esto, pilla la talla 2 o quizá la 3, como mucho. Al tener relaciones sexuales, es una buena idea trabajarlos un poco antes y, desde luego, sigue haciéndolo durante la sesión, para que la sangre fluya hacia el pezón y estén más sensibles mientras os lo estáis montando. Aunque si no juegas muy a menudo con otros tíos, dales caña al menos 3 veces por semana y deja que las ventosas actúen durante unos 30 minutos, de esa forma los pezones irán creciendo cada vez más. Cuanto más grandes, también se harán más sensibles.

Hay que lubricar los pezones con lubricante de silicona, después ponte las ventosas, ya que, si no, no van a aguantar mucho enganchados. Si eres peludo, vas a tener que afeitarte la zona o al menos recortar los pelos para que la succión de las ventosas funcione. ¡Tienes que estar seguro de que lo que realmente quieres hacer es recortarte el vello antes de poner la maquinilla sobre ese pecho peludo!

Pinzas:

Es importante practicar tú solo con las pinzas que compres, para asegurarte de que eres consciente de tu propio límite de dolor, mejor que descubrirlo cuando eres incapaz de decir ''no puedo más'', porque te han puesto una mordaza – aunque bueno, eso puede que os ponga también, so cerdos. Veréis que, como la mayoría de las cosas, tu nivel de tolerancia aumentará al ir practicando, o sea que no te dé el bajón si al principio no aguantas mucho. Podrás ir aguantando más según pase el tiempo.

Átate los pezones:

Vas a tener que usar los cordones de los zapatos o una cuerda para ponértelos alrededor de los pezones. Al hacerlo, se empieza a alargar los pezones, lo cual aumentará la sensibilidad. Después de tirar de ellos puedes empezar a rodearlos con el cordón desde la base hasta la punta. La mejor forma de empezar es atar solo un nudo, pero no demasiado apretado – es solo para mantener la cuerda en su sitio mientras la enrollas alrededor del pezón. La idea es envolver todo el pezón hasta que llegues a la punta y luego desde la punta podrás hacer lo mismo, acabando cada extremo con un nudo corredizo simple para poderlo aflojar fácilmente. Recomendaría usar un cordón o una cuerda que sea 100% algodón, ya que agarra mejor.

Elastradores y bandas de goma elástica:

Recomendaría utilizarlos con mucho mucho cuidado, y asegúrate de que conoces tus límites al ponerte bandas de goma elástica sobre los pezones. La idea no es que se te pongan los pezones azules ni que se te caigan, por eso, deberías probarlo con alguien que tenga experiencia, o una vez que conozcas tus límites en lo que se refiere a atarte los pezones.

Hacerte un piercing para que crezcan:

Me he hecho piercings en los pezones varias veces y siempre ha sido un tema a debatir, ya que algunos tíos insisten en que hacerles agujeros disminuye lo sensibles que son, mientras que yo creo que, al hacerlo, me ha aumentado la sensibilidad. Hacerte piercings en los pezones probablemente aumentará su tamaño, como cualquiera que lo haya hecho te lo podrá confirmar. Si te quitas el piercing o se sale del cuerpo, te quedará un pezón más grande que el otro. Ten en cuenta que, si te pones un piercing en los pezones, no podrás jugar con ellos durante un par de meses mientras cicatrizan. Es importante seguir los cuidados que te dé el tío que te hace el piercing, para poder tenerlos a tono y montártelo otra vez cuanto antes.

Las ventajas de currarte los pezones con fuerza, de atártelos o de usar bandas de goma elástica o los elastradores, es que la semana siguiente verás que te saldrán costras en los pezones y se van a poner muy blandos. En el caso de muchos tíos, te excitas hasta cuando te roza un poco la camisa la semana después de hacer esto, ya que te recuerda la sesión que te montaste. La costra puede preocuparte un poco al principio, pero no pasa nada, los pezones cicatrizan muy rápidamente y al final acabas con un pezón más grande, o sea, plan perfecto. Si piensas que te has hecho una herida demasiado grande o te está sangrando, en ese caso, ve al médico cuanto antes, por supuesto.

Por lo tanto, ¿ dónde se encuentran los juegos con los pezones en tu lista de morbos ahora que sabes que los puedes convertir en una forma de obtener una erección instantánea? ¿Te han entrado ganas de probarlo? Quizás es hora de pillarte unas ventosas y unas pizas, y de ver cómo van las cosas dentro de un mes. Puede que te estés perdiendo un mundo de dolor placentero que podrías estar disfrutando.

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